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"El futuro lo haremos juntos, en paz, en unión y libertad"

Así finaliza el documento en conmemoración del Bicentenario de la Independencia, que diputados y senadores nacionales aprobaron ayer, en Asamblea Legislativa. En la nota el texto completo.

Hace doscientos años en estas tierras del Tucumán, nuestros antepasados respaldaron un concepto de Patria identificado con tres ideales: el de la dignidad e igualdad de todos los hombres y mujeres; el de su libertad personal para pensar, vivir y desarrollarse con sus familias de acuerdo a su escala de valores y el de la independencia de nuestra nación de toda otra potencia del mundo. Ideales fundadores que constituyen la esencia y la razón misma del ser de nuestra Patria.

Desde su nacimiento, la Nación Argentina se dio a sí misma un deber y un compromiso: el de bregar por la unidad y libertad de los pueblos hermanos de Sudamérica. La sangre de muchos argentinos fecundó la independencia de otros países del continente. Hoy nos hemos constituido como impulsores de la paz y la democracia en la región, sosteniendo firmemente la bandera de la integración regional, proyectando desde allí al mundo entero nuestra vitalidad, nuestra creatividad y nuestros valores.

La República Argentina se conformó por el acuerdo y el aporte de cada una de las provincias que le dieron su existencia, y corresponde que honremos esa decisión respetando los derechos que surgen del federalismo y fortaleciendo los gobiernos provinciales y municipales.

En doscientos años de convivencia hemos consolidado las instituciones de la república bajo el régimen democrático, entendiendo al estado de derecho como único camino para garantizar la plena vigencia de los Derechos Humanos reconocidos por nuestra Constitución Nacional.

En el Bicentenario de la Declaración de la Independencia, en esta Ciudad de San Miguel de Tucumán, los ahora representantes del pueblo de la Nación y de las provincias, ratificamos el compromiso de nuestra República con la construcción de la igualdad de oportunidades para todos; con la universalidad y calidad de la educación y la salud públicas; con el trabajo digno; con el pleno respeto de la diversidad; con la protección de nuestros niños y adultos mayores; con el cuidado del ambiente, la preservación del ecosistema y el desarrollo sustentable para nosotros y las generaciones venideras.

Hoy comenzamos a recorrer el tercer siglo de nuestra historia como Nación libre. El primero de ellos fue el de la emancipación y la organización nacional. El segundo, el de la democracia, la conquista de los derechos políticos y sociales y el ascenso de la mujer a la dignidad ciudadana. Tenemos frente a nosotros el desafío y a la vez la firme convicción de que este nuevo siglo que comienza será el de la equidad, el de la inclusión y el de la convivencia, respetando la diversidad y el pluralismo, en el marco del cumplimiento irrestricto de nuestra Constitución Nacional. Los próximos cien años serán obra y legado de las mujeres y los hombres que compartimos este tiempo. El futuro lo haremos juntos, en paz, en unión y libertad.

Dado en San Miguel de Tucumán, a seis días de julio de 2016