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AMPLIARJoyas de los hombres de Neanderthal (foto: Ansa)

Los Neanderthal amaban las joyas

Los cavernícolas hombres de Neanderthal amaban las joyas y realizaban muchas, con variados diseños, utilizando huesos y dientes de animales, conchillas marinas y marfil, según lo demuestran pruebas científicas que clausuran décadas de debates.

Detalles.

Análisis de las proteínas de algunos restos óseos hasta ahora no identificados, y hallados junto a algunas joyas en Francia, demuestran que los fósiles pertenecían a los Neanderthal, que debieron ser los artífices de las piezas halladas.

El estudio, publicado por la revista de la Academia de Ciencias de Estados Unidos (Pnas), fue coordinado por uno de los pioneros del análisis de proteínas antiguas, Matthew Collins, de la Universidad de York en Reino Unido.

Descubiertas entre 1949 y 1963 en la célebre Cueva de Renne, en Arcy-sur-Cure, en el centro de Francia, en plena Borgoña, estas joyas fueron confeccionadas hace 42 mil años, en medio del período en el que desaparecieron los Neanderthal y se difundieron en Europa los hombres modernos, es decir, los Homo Sapiens.

Los especialistas se hallaban divididos entre quienes consideraban a los Neanderthal como autores de las joyas, y los que, en cambio, los consideraban incapaces de tal tipo de expresión simbólica y decían que habían sido hechas por los Sapiens. Para cerrar la discusión llegó la ciencia dura con el análisis de las proteínas de fragmentos óseos hallados cerca de las joyas, que hasta ahora permanecían no identificados porque eran demasiado pequeños para extraer muestras de ADN, o eran escasos para las pruebas.

Los resultados con los últimos métodos no dejaron dudas, los fragmentos corresponden a un niño Neanderthal. Lo indican dos pruebas, una sustancia llamada asparagina que se halla en las proteínas del Neanderthal y no del Sapiens y una forma de nitrógeno típica de los niños alimentados con leche materna.

También la datación por carbono demostró que el fósil tenía la misma edad de las joyas, unos 42 mil años.

A la luz del descubrimiento "la explicación más simple es que fueron los Neanderthal los que ensamblaron las joyas", dice uno de los responsables del estudio, Jean-Jacques Hublin, paleoantropólogo del Instituto Max Planck para la antropología evolutiva de Leipzig, Alemania.

Según Hublin, los Neanderthal podrían haber aprendido de los Sapiens la técnica pero debieron haberlas producido solos.