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AMPLIARPinochet murió como senador vitalicio chileno

Batahola en el Congreso chileno al evocarse ataque guerrillero contra Pinochet

Un diputado de derecha provocó tensos momentos en el Congreso en Chile, al irrumpir imprevistamente con la solicitud de un minuto de silencio por cumplirse 30 años del frustrado atentado contra el dictador Augusto Pinochet.

Detalles.

A 20 minutos de iniciada la sesión, el diputado de la pinochetista Unión Demócrata Independiente (UDI), Ignacio Urrutia, interrumpió al presidente de la Cámara Baja, el socialista Osvaldo Andrade: "Hoy se cumplen 30 años del intento de asesinato de mi general Pinochet donde murieron cinco escoltas. Todos los asesinos están libres, incluyendo el autor intelectual que está aquí adentro", disparó Urrutia, interrumpido luego por abucheos y gritos de otros parlamentarios presentes.

La alusión de Urrutia era para el diputado y actual presidente del Partido Comunista, Guillermo Teillier, quien en 1986 era jefe militar del Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR).

Ante la irrupción de Urrutia, algunos legisladores alegaron diciendo: "Presidente no corresponde!". Acto seguido, el diputado UDI aseveró: "Quiero pedir un minuto de silencio por los escoltas..." Andrade rechazó la solicitud argumentando que "tenemos la norma reglamentaria que los minutos de silencio se piden el día anterior, si usted lo pide para mañana con todo gusto lo examinaremos".

La tarde del 7 de septiembre de 1986, Pinochet regresaba junto a su comitiva de la residencia de descanso en El Melocotón, sector cordillerano de Santiago, cuando fue interceptado por cerca de 20 milicianos armados del FPMR. El dictador resultó ileso gracias a la pericia de su chofer que retrocedió inmediatamente el vehículo en el que viajaba, evitando la distancia de acción de lanzacohetes. En cambio, murieron cinco escoltas de carabineros, lo que desató la furia de los organismos de seguridad de la dictadura y una feroz revancha. Cuatro opositores al régimen fueron apresados en sus casas en la madrugada y fueron ejecutados a sangre fría, entre ellos el periodista José Carrasco.