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AMPLIARChile entrega nacionalidad a 45 hijos de refugiados palestinos.

Bachelet otorga nacionalidad a 45 hijos de desplazados palestinos

En el Día Mundial del Refugiado, la presidenta chilena, Michelle Bachelet, entregó ayer la carta de ciudadanía a 45 niños y jóvenes de entre 7 y 20 años, hijos de desplazados palestinos que llegaron al país en 2008.

Detalles.

"Ser una nación integrada al mundo es mucho más que profundizar relaciones económicas mediante tratados de libre comercio. Es mucho más que pertenecer a organizaciones internacionales y participar en foros u operaciones militares", dijo la gobernante.

Para Bachelet, "hacer nuestros los dolores y los problemas de los seres humanos allí donde se encuentren, es asumir como propios los valores permanentes del respeto, la tolerancia, la inclusión, la cooperación y la protección de los derechos de las personas".

"Abrir nuestras fronteras no consiste solamente en permitir el libre tráfico de bienes y servicios: es abrir nuestras casas, nuestras calles, nuestras culturas y nuestras vidas a todos. Es tender la mano a quienes han elegido Chile como una segunda patria", añadió la médica, ex refugiada política a fines de los años 70.

En 2007, a través del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), el Gobierno de Chile (en el primer mandato de Bachelet) accedió a recibir y reasentar a un grupo de 116 personas palestinas (28 familias), provenientes de Irak. El año pasado se entregaron las cartas de nacionalidad a los adultos del grupo que llegó en 2008 a Chile, pero quedó pendiente la respuesta a los niños y niñas de estas familias. "Hoy estamos cumpliendo con esta deuda, al entregar a 45 niños y niñas las cartas de nacionalización con las que asumen nuestra nacionalidad. Hoy podemos decir, con propiedad, que son chilenos y chilenas; que esta patria los ha hecho, por adopción, hijos suyos", subrayó la Jefa de Estado.

Bachelet reiteró que su Gobierno está realizando las gestiones para poder dar reasentamiento a migrantes sirios. "Hoy Chile devuelve la mano a las familias que sufren, a los padres y madres que buscan un lugar para asentarse y dar un mejor futuro a sus hijos. En especial a los niños y niñas, a los cuales nos debemos para que alcancen sus sueños de paz y bienestar", afirmó.

Al finalizar su intervención, citó a la asesinada parlamentaria del Partido Laborista británico. "Jo Cox, esa gran mujer que acaba de perder Gran Bretaña por causa del odio y la ignorancia, lo dijo muy claramente en su primer discurso como diputada. Voy a citarla: 'Son muchas más las cosas que tenemos en común con los otros, que las cosas que nos dividen', concluyó.