AMPLIARDilma anuncia que resistirá el golpe

12/05/2016 - Juicio Político

Suspenden a Rousseff por 180 días y asume el golpista Tamer

Acompañada por su mentor político Lula da Silva, Dilma Rousseff dejó ayer la presidencia en un acto ante ministros y militantes a los que pidió que la acompañen en la resistencia contra el "golpe" y por su regreso al gobierno. Temer el corrupto.

Detalles.

La mandataria fue separada de su cargo luego de que el Senado aprobó la apertura de un juicio político.

"Esto es un impeachment fraudulento, un verdadero golpe. Pude haber cometido errores, pero no cometí crímenes, no tengo dinero en el exterior", dijo Rousseff junto a Lula tras ser notificada de su separación del cargo. "Yo ya sufrí el dolor indescriptible de la tortura, y el dolor agresivo de una enfermedad (padeció cáncer) y ahora sufro una vez más el dolor de la injusticia", confesó.

Y agregó: "lo que más duele es que estoy siendo víctima de una farsa jurídica y política".

"Estoy siendo juzgada injustamente", afirmó en sus últimos minutos en el Palacio del Planalto, donde algunos ministros y asesores no ocultaban su desconsuelo.

Era el caso de la ministra Eleonora Mennicucci que se ubicó junto a Rousseff en el acto de despedida del palacio presidencial al que ambas llegaron el 1 de enero de 2011.

Rousseff y Mennicucci fueron compañeras de celda a comienzos de los años 70 cuando ambas estuvieron presas por orden de la dictadura a la que enfrentaron siendo integrantes de un grupo armado.

Mennicucci es una antigua activista de la causa feminista, y como tal organizó varios eventos en respaldo de Rousseff la primera mujer que llega a la presidencia.

Según la profesora Mennicucci su vieja amiga Rousseff es "víctima del machismo y preconcepto que todavía son defectos muy arraigados en la sociedad patriarcal brasileña que no conciente a una mujer ejerciendo el poder".

El Senado votó  por 55 votos contra 22 el inicio de juicio político por lo que tendrá que licenciarse del gobierno durante hasta 6 meses.

Para que se diera inicio al proceso era necesario que la oposición obtuviera una mayoría simple de 41 votos sobre un total de 81 miembros de la Cámara Alta.

Pero la oposición conquistó 55 lo que es más de dos tercios, y esta es una mala señal para Rousseff porque para ser condenada en el juicio se requieren 54 votos.

Rousseff se emocionó y su voz quedó embargada, pero luego en seguida retomó la palabra para anunciar que se defenderá ante el tribunal que se formará en el Senado para retornar al gobierno.

"La lucha por la democracia no tiene fecha para terminar, es permanente, la lucha contra el golpe es larga, puede ser vencida y vamos a vencer" agregó Rousseff en el salón Este del Planalto.

"Vamos a demostrar al mundo que hay millones defensores de la democracia en nuestra país, la historia está hecha de lucha" continuó.

Y terminó su alocución diciendo " la historia está hecha de lucha… jamás voy desistir de luchar".

La decisión del Senado vino después de meses de intensa batalla política en medio de la indignación del pueblo por un enorme escándalo de corrupción en la petrolera estatal Petrobras y de una debacle económica, y ha arrojado al gigante latinoamericano a la incertidumbre política a solo unos meses de la celebración de los Juegos Olímpicos.

Rousseff ha dicho reiteradamente que luchará, pero no ha dicho cómo, y la mayoría de los caminos se han cerrado. Hasta ahora, el Supremo Tribunal Federal, la corte suprema de la nación, ha rechazado opinar sobre el caso en su contra.

El Senado tiene 180 días para realizar un juicio y decidir si Rousseff debe ser retirada del cargo de manera permanente, en cuyo caso Temer sería presidente interino durante el tiempo que le restaría a ella; es decir, hasta diciembre de 2018.

Algunos de sus partidarios han prometido una campaña de protestas y huelgas que podrían complicar los esfuerzos de Temer para gobernar.

Quienes apoyan el juicio político aseveran que Temer, un político de carrera y experto constitucional que ha publicado una colección de poesía, es la mejor esperanza para revertir el colapso económico de Brasil.

Temer, de 75 años, prometió recortar el gasto público y privatizar muchos sectores controlados por el Estado. No obstante, ha negado constantemente las acusaciones de Rousseff de que tiene la intención de desmantelar los populares programas sociales que ayudaron al Partido de los Trabajadores a sacar de la pobreza a aproximadamente 35 millones de personas en sus 13 años en el poder.

Conforme el juicio político contra Rousseff parecía cada vez más inevitable, Temer comenzó calladamente a formar un nuevo gabinete. Su principal allegado será quien ocupará el cargo de ministro de Finanzas, Henrique Meirelles, ex director del banco central de Brasil.

Los mercados reaccionaron positivamente a la noticia de apertura de juicio político a Rousseff. Y la divisa brasileña, el real -que ha caído velozmente ante el dólar durante el último año- continuó su reciente repunte.

Cuando la medida de juicio político fue introducida el año pasado en el Congreso, fue vista generalmente con pocas probabilidades de avanzar. En febrero, expertos estaban pronosticando que ni siquiera sería aprobada por una comisión en la Cámara de Diputados.

Pero su líder, el ex presidente de la cámara Eduardo Cunha, fue más hábil que el gobierno en cada giro, y el proceso ganó impulso con cada una de las exitosas maniobras de Cunha. Rousseff afirma que Cunha, quien fue suspendido la semana pasada por acusaciones de corrupción y obstrucción de la justicia, utilizó el juicio político para vengarse de ella. 

Posteriormente dejó la sede del gobierno y fue junto a Lula al encuentro del público que la aguardaba en la Plaza de los Tres Poderes, cerca de una inmensa bandera brasileña izada sobre un mástil de 100 metros de altura.

Unas 2.000 personas, entre ellas muchas militantes del movimiento feminista, recibieron con algarabía a la presidenta en la Plaza, que es una inmensa plancha de cemento blanco donde hoy rebotaban los agresivo rayos del sol del mediodía.

"Quiero decirles sinceramente que les agradezco que me regalen este momento de alegría en este momento de tristeza que me toca vivir", dijo Rousseff dirigiéndose a sus seguidores.