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AMPLIARBachelet anuncia la promulgación de la ley, ayer en Santiago

En Chile el que hace trampas pierde el cargo electoral

La presidenta Michel Bachelet promulgó ayer la normativa más importante de su agenda de "probidad y transparencia". La ley establece sanciones de pérdida del cargo politico a candidatos que infrinjan la ley electoral vigente.

No se debe traicionar el espiritu de la democracia, dijo.

"El que hace trampa pierde", fueron las palabras de Bachelet en la ceremonia donde promulgó esta nueva ley que establece sanciones contra parlamentarios, alcaldes, consejeros regionales y concelajes que incumplan con normas de transparencias, límites y control de gasto electoral, sentenciando que “quien traicione el espíritu de la democracia, no podrá ser actor en ella”.

“Vulnerar las normas que rigen el funcionamiento de nuestra democracia, merece sanciones ejemplares, quienes pierdan el cargo por no financiar su campaña conforme a la Ley no podrán optar a ninguna función o empleo público durante tres años”, agregó la máxima autoridad del país.

La nueva legislación establece que las autoridades que pierdan su escaño quedarán inhabilitadas para optar a cargos de representación popular en los dos procesos eleccionarios siguientes a la sanción de cesación para optar a un cargo o función pública dentro de los tres años posteriores a dicha sentencia.

En tanto, esta nueva legislación establece que será el Tribunal Calificador de Elecciones (Tricel) quién conocerá, investigará y sancionará las infracciones a requerimiento del Consejo Directivo del Servel.

“Estas sanciones son, sin lugar a dudas, de las más graves en nuestro ordenamiento jurídico y, por lo mismo, tendrán que ser fundadas y calificadas apropiadamente. Esto lo va a determinar el Tribunal Calificador de Elecciones, a requerimiento del Consejo Directivo del Servicio Electoral, en caso de infracción grave a las normas sobre transparencia, límites y control del gasto electoral”, subrayó Bachelet. 

Y agregó que “estamos dotando a Chile de un entramado legislativo fuerte, que se haga cargo de los temas del presente, pero sobre todo, prevenga riesgos del futuro. Queremos que las demandas ciudadanas por mayor transparencia y control tengan una respuesta adecuada y que, mediante acciones y no palabras, podamos recuperar la confianza de nuestros compatriotas en sus instituciones”.