06/11/2015 - Teatro

El Silencio cumplirá otro mes de exitosas presentaciones

Todos los domingos, a las 20, en la sala de cámara del teatro Alberdi, de calle Jujuy esquina Crisóstomo Alvarez, se realiza la presentación del espectáculo de danza contemporánea “El silencio”, sobre una idea y bajo la dirección del docente, bailarín y director Horacio Moya, que avanza a un nuevo ciclo de presentaciones después de cumplir dos exitosos ciclos de presentaciones..

“El público nos ha ido dejando sus formas de ver, sus impresiones, que en varios casos son muy distintas, cada persona va encontrando su silencio, cuando escuchamos estas devoluciones, vemos que la obra los empapa de sensaciones, y que los espectadores son atravesados por el trabajo. Estamos completamente felices, porque hay una muy buena recepción por parte del público, siempre con palabras bellas en referencia a la obra y al trabajo de las chicas en el escenario. El público es completamente variado, no se cierra solo a personas mayores o adolescentes, tenemos un producto que, a mi forma de ver, es muy amable a la vista, sea de la edad que sea la persona puede disfrutar, ya sea de los movimientos, la interpretación, las luces, la música o el conjunto de todos esos factores” analizó el director y coreógrafo Horacio Moya..

Intervienen en el espectáculo las bailarinas Ana Darelli, Luján Arroyo y Pame Navarro. Esta nueva temporada se extenderá a lo largo de todo el mes demostrado un crecimiento sostenido, un desarrollo extraordinario y una progresiva inserción en el público durante todo el siglo XX, y es en las últimas décadas en las que se ha convertido, en uno de los canales expresivos más interesantes del arte, y al que la platea ha dado un sí rotundo.  Los integrantes del elenco definen la obra en la elocuente frase elaborada en conjunto “Lugar donde los cuerpos conviven, comparten, se relacionan…. Estado en el cual el ruido interno explota y se expresa a través del movimiento… Estos cuerpos escuchan y son escuchados…Sienten”.  

“La palabra silencio es difícil de asociar con un espectáculo de danza, casi siempre basada en una apoyatura musical, sin embargo cada persona va encontrando su ‘sentido’, con sus propias herramientas y formas de ver y sentir. Nuestra intención es generar distintas sensaciones, que el espectador, ávido de ver danza y el que no, se puedan sentir tocados por los diferentes estados que generan las chicas, y, a su vez, se mantengan expectantes del trabajo físico, que estén atrapados en todo momento por los movimientos. El drama escénico está presente constantemente en los cambios de estado, en la conversación sin voz, en las miradas y encuentros. En momentos en los cuales una quiere hablarle a la otra y esta segunda no se lo permite, ese silencio impuesto por el otro, donde uno no puede decir, no lo dejan” agregó el destacado director..

La música que integra la banda sonora está conformada por piezas de Pierre Van Dormael, Bartholomâus Trubeck, Yann Tyersen, CocoRosie, Nicolas Jaar, Tom Yorke, Milky Chance, Nym y Devendra Banhart.

“La música actúa como soporte expresivo, es la base sobre la que se genera el movimiento pero no es lo esencial. Si lo es, en cambio la permanente mutabilidad del movimiento que se multiplica y regenera a medida que se resuelven tensiones y aparecen otras nuevas. Hay lugar, dentro de lo pautado, para la improvisación y lo que surja a partir del momento, y es por eso que no hay una función igual a otra”, concluyó.