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AMPLIARDesde temprano abre sus puertas la feria donde se negociarán miles de millones de dolares

Abre la más importante cita de negocios de Cuba

Unas 900 empresas de más de 70 países participan desde este 2 de noviembre en la Feria Internacional de La Habana (FIHAV 2015), marcada por las expectativas del deshielo entre EE.UU. y la isla.

La 33 edición de la Feria de La Habana se celebrará en un espacio de 600.000 metros cuadrados -25.000 destinados a exhibición- y 25 pabellones, que albergarán a 2.000 expositores, según datos de la organización.

La nueva cita de la FIHAV es la primera que se celebra en la era del deshielo entre Cuba y Estados Unidos, que el pasado 20 de julio restablecieron relaciones diplomáticas y reabrieron sus embajadas en Washington y en La Habana, tras más de medio siglo de histórica enemistad.

Aunque EE.UU. mantiene vigente su embargo hacia la isla, este nuevo escenario ha disparado el interés internacional por el país caribeño, que durante el mandato del presidente Raúl Castro ha emprendido además un plan de "actualización" de su economía socialista, con una controlada apertura a la iniciativa privada y nuevas reglas de juego para atraer capitales foráneos.

Inauguración del Consejo Empresarial EE.UU.-Cuba

En sintonía con los nuevos tiempos, una delegación norteamericana viajará a Cuba para participar en la apertura de FIHAV 2015 e inaugurar el Consejo Empresarial EE.UU.-Cuba. Esa delegación estará encabezada por David Thorne, asesor especial del secretario de Estado estadounidense, John Kerry, y cuyo objetivo con esta visita es dar apoyo al emergente sector privado que ha surgido en Cuba al calor de sus reformas.

La isla también aprovechará la FIHAV para presentar los primeros proyectos aprobados para su Zona Especial de Desarrollo del Mariel (ZEDM), una de las medidas estrella del Gobierno de Raúl Castro para captar capital foráneo y concebida como uno de los futuros motores de desarrollo del país.

Las nuevas reglamentaciones para favorecer la inversión extranjera en Cuba constituyen uno de los pilares de la "actualización" económica de la isla, que necesita, según ha admitido su Gobierno, una inyección de entre 2.000 y 2.500 millones de dólares anuales para hacer sostenible su modelo y sus reformas.