AMPLIARPianista

21/09/2015 - No vidente

La música le permitió observar el mundo

Ana Carmen Luna, egresada no vidente de la UNT, expresó su gratitud a la casa de altos estudios.

Cuando llegó a la Escuela de Música en el año 1953, Ana Carmen Luna había transitado por distintas instituciones buscando una oportunidad para poder estudiar. Su condición de no vidente complicaba ese objetivo, ya que eran pocos los establecimientos educativos habilitados para otorgar títulos secundarios a personas discapacitadas.

Ana tiene hoy 83 años y recuerda con alegría aquellos momentos de estudiante. Por eso, hace algunos días, envió a la UNT una carta de agradecimiento. En su relato, cuenta que la Universidad le permitió acceder al aprendizaje de la música y fue capaz de demostrar su alto rendimiento gracias a la ayuda de profesores y grandes maestros.

Tan es así, que llegó obtener una certificación en 1966 con la cual accedió a numerosas posibilidades laborales. Pudo desempeñarse como docente pionera en la educación de personas no videntes en distintas instituciones de la provincia como por ejemplo,  la Escuela de Danza (actual Escuela Superior de Educación Artística), el Conservatorio Provincial de Música y la Escuela Luis Braille.

Pero eso no fue todo, Ana Carmen llegó a integrar el Coro Veritas y el Coro del Consejo de Educación, del cual forman parte destacados profesores de música de la provincia. Participó en numerosos recitales de canto a nivel provincial, nacional e internacional  y buscó perfeccionarse mediante cursos como pianista acompañante y profesora integradora de música.

“Nada de esto hubiese sido posible sin la ayuda de la Universidad Nacional de Tucumán, que me abrió las puertas sin condiciones”, relata emocionada en su carta.