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AMPLIARLa brillante ferrari sale de la casa de Collor ayer

Allanan mansión de ex presidente Collor de Mello

Efectivos de Policía Federal brasileña allanaron ayer la mansión del ex presidente Fernando Collor de Mello -donde secuestraron autos de lujo-, quien es investigado por su presunta vinculación con el escándalo de corrupción en Petrobras, conocido como "Petrolao".

Los agentes ingresaron, con autorización judicial, en la fastuosa Casa da Dinda, residencia del senador Collor en la zona norte de Brasilia y en las oficinas de la TV Gazeta del estado de Alagoas, repetidora de la cadena Globo, de la cual es propietario.

Una Ferrari roja, impecable, atravesó ayer por la mañana el portal blanco de la Casa da Dinda donde la policía también incautó un Porsche negro y una Lamborghini plateada de propiedad del imputado.

Fernando Collor de Mello fue reelegido el año pasado como senador por el estado de Alagoas, uno de los más pobres del país.

El Supremo Tribunal Federal ordenó procedimientos en los estados Alagoas, Pernambuco, Bahia, en la región nordeste, San Pablo y Rio de Janeiro, del sudeste, el suereño Santa Catarina y el Distrito Federal de Brasilia en el marco de las investigaciones por el "Petrolao", iniciadas en un juzgado federal del estado sureño de Paraná.

"Estas medidas son necesarias para el esclarecimiento de los hechos investigados en el Supremo Tribunal Federal, siendo que algunas diligencias tuvieron como objetivo garantizar la aprehensión de bienes adquiridos posiblemente a través de maniobras delictivas", informó hoy la Fiscalía. Dado que Collor goza de inmunidad parlamentaria su causa sólo puede ser sustanciada por el Supremo Tribunal Federal con el apoyo de la Fiscalía Federal.

El empresario Ricardo Pessoa, procesado en la causa de Petrobras, denunció que Collor le cobró 20 millones de reales (6,6 millones de dólares) para facilitar contratos por unos 300 millones de reales (100 millones dólares) con la BR Distribuidora, empresa subsidiaria de Petrobras.

En 1989 Collor fue electo presidente a los 40 años, en los primeros comicios libres tras el fin de la dictadura militar que imperó entre 1964 y 1985.

Debido a denuncias de corrupción que incluyeron gastos exagerados en la Casa da Dinda, donde se dice que las llaves están bañadas en oro, Collor renunció a la Presidencia en 1992.

Los policías que participaron este martes en el operativo "Politea" también requisaron una fundación de la familia Collor en Alagoas y el departamento en Brasilia que se le asigna por su condición de parlamentario.

Hubo entredichos, amenazas y principio de tumulto cuando los policías federales fueron interceptados por la Policía Legislativa responsable por la custodia de las viviendas de los senadores.

Hasta el momento el legislador no hizo declaraciones pero soltó un comentario a través de las redes sociales en el que consignó: "La defensa del senador Collor repudia con vehemencia la aparatosa operación policial realizada en su residencia".

Además fueron allanadas las oficinas de los senadores Fernando Becerra del Partido Socialista y Ciro Nogueira, presidente del Partido Progresista.

Al avanzar sobre parlamentarios la Justicia abrió, de hecho, una nueva fase del proceso por el Petrolao iniciada por un juez federal de primera instancia que ordenó la detención de ex gerentes de Petrobras, directivos de empresas privadas y ex parlamentarios sin fueros.

Este operativo que incluyó 53 órdenes de allanamiento e incautación de bienes es visto por analistas como una bisagra en la megacausa del "Petrolao" y anticipa lo que ocurrirá cuando ésta comience a ser ventilada en la más alta Corte.

Observadores se preguntaban ayer si el Operativo Politea beneficia o perjudica a Dilma Rousseff, cuyo impeachment es exigido por la oposición.

No hay respuestas definitivas para ese interrogante.

Lo que surge, en principio, es que si bien Collor era aliado del gobierno, su relación más próxima es con el jefe del Senado, Renan Calheiros, sindicado como uno de los políticos interesados en desgastar a Dilma.

Por lo tanto el escándalo envolviendo a Collor afecta a Rousseff pero quizá más a al senador Calheiros, que también está en la mira del la Fiscalía por el cobro de sobornos.

Por otra parte ayer trascendió en medios locales que la misma Fiscalía podría procesar por su participación en el "Petrolao" a Eduardo Cunha, jefe de Diputados considerado como el enemigo más implacable del gobierno.