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AMPLIAREl ministro de Deportes de Sudáfrica, Fikile Mbalula

Sudafrica investiga sobornos durante su mundial

Las autoridades sudafricanas comenzaron una investigación preliminar sobre las acusaciones de soborno relacionadas con el Mundial de 2010, y un legislador de la oposición dijo ayer que tiene información que apunta a hubo funcionarios de "alto nivel" involucrados.

Anton Alberts, del partido Freedom Front Plus, dijo que la información que recibió su partido es que una pesquisa previa sobre pagos relacionados con la Copa del Mundo que organizó Sudáfrica fue detenida por "interferencia de alto nivel".

"Nos dice que sucedió algo, y habla de una investigación que fue detenida desde el ámbito político", dijo Alberts, un legislador de oposición.

La investigación sudafricana empieza después que el Departamento de Justicia estadounidense acusó la semana pasada a 14 personas por actos de corrupción relacionados con el fútbol. Entre ellos, siete dirigentes de la FIFA fueron arrestados en Zúrich, donde emprendieron procesos legales contra la solicitud de extradición de Estados Unidos.

En una pesquisa separada, las autoridades suizas investigan el proceso en el que se otorgó las sedes de los mundiales de 2018 y 2022 a Rusia y Catar, respectivamente.

La peor crisis en los 111 años de historia de la FIFA desembocó en la renuncia del presidente del organismo, Joseph Blatter, quien el viernes fue relegido a un quinto período de cuatro años. El dirigente suizo de 79 años, quien dejará el cargo cuando se realicen nuevas elecciones, no ha sido mencionado en ninguna de las investigaciones.

Australia, uno de los candidatos que perdió las elecciones para elegir la sede de 2022, comenzó su propia investigación el jueves sobre acusaciones de corrupción en su candidatura.

En Pretoria, Alberts dijo que los documentos en su poder serían entregados a la unidad de investigación de crímenes prioritarios para que sean investigados.

"La información está bastante cruda", dijo el legislador, quien agregó que la gente ha empezado a hablar ahora que detonó el escándalo a nivel mundial.

El vocero de la unidad contra el crimen organizado de Sudáfrica, Hangwani Mulaudzi, dijo a la Associated Press que se abrió un expediente y que el organismo decidirá si la información proporcionada por el partido requiere una investigación completa.

"Hay investigadores estudiando el caso", dijo Mulaudzi.

Mulaudzi no describió el contenido de los documentos recibidos por la Dirección de Investigación de Delitos Prioritarios.

Según la acusación del Departamento de Justicia, dirigentes de la candidatura sudafricana y del gobierno pagaron sobornos por 10 millones de dólares a través de la FIFA a algunos dirigentes a cambio de su respaldo para que Sudáfrica ganara la sede de 2010.

Uno de los dirigentes, el estadounidense Chuck Blazer, admitió en su declaración de culpabilidad haber recibido sobornos en la votación que otorgó el Mundial a Sudáfrica, que superó 14-10 a Marruecos en la elección de 2004. Marruecos también ha sido acusado de intentar comprar votos.

El gobierno de Sudáfrica negó el pago de sobornos y apuntó que la entrega de esos 10 millones de dólares se realizó "legalmente" y que se dieron al ex vicepresidente de la FIFA Jack Warner y para el desarrollo del deporte en su región caribeña.

En cambio, Warner y Blazer, que entonces eran presidente y secretario general de la CONCACAF, compartieron el dinero, según la acusación del Departamento de Justicia. Otro dirigente sudamericano de la FIFA, que no es identificado por la acusación, también está involucrado en la trama de sobornos para votar por Sudáfrica.

Warner es una de las 14 personas, entre responsables de la FIFA y empresarios de márketing deportivo, que enfrentan cargos de corrupción tras las acusaciones derivadas de una investigación en Estados Unidos.

El ex presidente sudafricano Thabo Mbeki también negó tener conocimiento de cualquier soborno durante su mandato, cuando se realizó el proceso de candidatura.

Mulaudzi dijoi que no investigan a ningún dirigente en específico, y negó reportes de que el actual jefe de la federación, y encargado local de la organización del Mundial de 2010, Danny Jordaan, está involucrado en los sobornos.

Jordaan asumió la semana pasada un cargo como alcalde de Nelson Mandela Bay, en el sur de Sudáfrica.