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04/02/2015 - Mar del Plata

La Asociación Argentina de Actores denunció a un empresario por agresiones

La Asociación Argentina de Actores (A.A.A.) denunció ayer al empresario teatral Ariel Diwan, por “agresiones violentas” en contra de su secretario general, Luis Alí, y otros representantes de esa entidad, durante la ceremonia de entrega de los Premios Estrella de Mar que tuvo lugar anoche en la ciudad de Mar del Plata.

La A.A.A advirtió en un comunicado sobre “la violenta situación sufrida por nuestro secretario general y otros compañeros dirigentes luego de que, apelando al derecho de libre expresión y en el marco de la entrega de los premios, fuera leído nuestro mensaje de salutación a los ternados y premiados, a los compañeros actores y a los productores que realizan la temporada teatral en Mar del Plata”.

Los hechos denunciados por la Asociación Argentina de Actores ocurrieron anoche durante la 40ma. entrega de los Premios Estrella de Mar, que se realizó en el Polideportivo de Mar del Plata y donde la obra “Dos pícaros sinvergüenzas”, protagonizada por Adrián Suar y Guillermo Francella se quedó con el premio Estrella de Mar de Oro.

Durante su alocución, el secretario general de Actores “también contuvo la denuncia y el reclamo hacia quien incumple con nuestro Convenio Colectivo de Trabajo y obligaciones impuestas por normas de seguridad social como son los aportes a nuestro sistema solidario de salud”, indica el comunicado.

Fuentes de prensa de la asociación indicaron que realizaron este comunicado “teniendo en cuenta las posteriores versiones falaces de los hechos, vertidas por la empresa intentando victimizarse para desvirtuar el origen de nuestro reclamo”.

“No es cierto que algún dirigente de nuestro sindicato agrediera ni verbal ni físicamente a ninguna persona. Muy por el contrario, hemos sido increpados violentamente y hubo intentos de agresión física de parte del empresario Ariel Diwan, ante numerosos testigos presentes (como muestran algunos videos)”, denuncia la asociación en su comunicado.

Además, añade, “hubo empujones intimidatorios de la 'gente de seguridad' ligada a la empresa, y fuimos obligados a abandonar el lugar. Sólo el pedido de ayuda y la oportuna intervención del empresario teatral Javier Faroni evitó que fuéramos víctimas de una agresión mayor”.

“Con protección de gente de la organización del Premio, y sin posibilidades ya de permanecer en lo que consideramos también nuestro lugar, tuvimos que salir del mismo”, recordaron.