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29/10/2014 - Artificio dilatorio

Recusaron a los jueces y se supspendió el juicio contra Manlio Martínez

El juicio contra el ex juez federal Manlio Martínez se suspendió tras ser aceptada por la Cámara Federal de Casación Penal la recusación de los miembros del Tribunal Oral Federal que iba a llevar adelante el proceso. El debate se retoma en febrero

 El juicio contra el ex juez Manlio Torcuato Martínez por delitos de lesa humanidad cometidos durante la dictadura, que debía comenzar ayer, fue suspendido y reprogramado para febrero del próximo año, tras ser aceptada por la Cámara Federal de Casación Penal la recusación de los miembros del Tribunal Oral Federal que iba a llevar adelante el proceso.

La decisión de suspender el juicio se tomó luego de que la Cámara hiciera lugar al recurso de queja presentado por la defensa del imputado,en el que se recusó a los jueces María Alicia Noli, Hugo Norberto Cataldi y José Fabián Asís. En la presentación, los abogados de Manlio Martínez sostuvieron que dudan de la imparcialidad de Noli, quien fue apartada en una causa que se tramita en el Tribunal Oral Federal de Santiago del Estero por haber sido querellante.

Los defensores de Martínez explicaron que existe una “similitud direccional” entre ambas causas porque en Santiago del Estero la sentencia tomó como base, entre otras argumentaciones, que la jueza se excusó de causas de Derechos Humanos en Tucumán porque su esposo es desaparecid había sido víctima del terrorismo de Estado porque su esposo fue víctima del terrorismo de Estado (está desaparecido) y ella actuó como querellante.

Los representantes del ex juez también manifestaron que si Noli se apartó de la causa “Romero Nikilson” también debería haberlo hecho en ésta, ya que consideraron que este juicio es una derivación del anterior.

En cuanto a Cataldi y Asis, afirmaron que “opinaron acerca de la capacidad de Noli para intervenir en la causa” al rechazar una recusación previa. 

La nueva fecha para el comienzo del juicio, que tendrá como único imputado al ex magistrado, se fijó el 16 de febrero de 2015.

El abogado querellante Bernardo Lobo Bugeau dijo que la recusación "es un pedido formal vinculado con la integración del tribunal, que en este caso fue elaborado por los defensores del imputado, quienes pidieron que los tres jueces sean apartados".

"La Cámara Federal de Casación Penal hizo lugar a este pedido y dejó suspendido el proceso hasta febrero del año de 2015", agregó.

Martínez está acusado por "cajonear" más de 300 hábeas corpus durante el Operativo Independencia.

También se les imputan los cargos de abuso de autoridad y violación de los deberes de funcionario público; denegación y retardo de justicia en los homicidios de María Alejandra Niklison, Fernando Saavedra, Eduardo González Paz, Juan Carlos Meneses y Atilio Brandsen.

Además, se lo acusa de prevaricato, privación ilegítima de la libertad de Miguel Atilio Romano y de haber sido miembro de una asociación ilícita.

Según Lobo Bugeau, “Martínez fue un pilar de la denegación sistemática de justicia que existió en el período que va de 1976 a 1983, sobre todo en lo que se refiere a comisión de delito por omisión".

"El era un garante de justicia y esa obligación constitucional jamás la cumplió en debida forma en las causa de la llamada lucha antisubversiva", agregó.

Por su parte, el fiscal Leopoldo Peralta Palma sostuvo que “es un juicio muy importante ya que el imputado es un ex juez federal que ejerció su cargo durante la dictadura y queda claro que tuvo conocimiento de todos los hechos que sucedieron entonces y no hizo nada para evitarlos”, indicó.

Peralta Palma destacó que “existe lo prescripto por el código penal en cuanto a los deberes de funcionario público, es por eso que la acusación consiste en que hubo promesas previas a los hechos que posibilitaron que los represores actúen con toda impunidad y confianza, sabiendo que no iba a haber intervención de la Justicia".

En su cuenta de facebook la querellante María Alejandra Romero Niklison, quien de milagro sobrevivó siendo una bebé a la masacre donde murieron cinco militanes montoneros expresó "son duras las peleas contra los poderosos y los que decidían sobre la vida o muerte de otros. Pero la impunidad no va a ser para siempre. Nos volvemos (a Santa Fe. Vino a Tucumán para la audiencia) pero presentaremos un pedido para que el imputado tenga que esperar el juicio donde deberia estar, hace mucho ya, en la carcel de Villa Urquiza". 

El 20 de mayo de 1976, un grupo integrado por militares y policías allanó, luego de lanzar explosivos y disparar con armas largas, una vivienda de Azcuénaga 1.816. Minutos después, yacían sin vida en su interior María Alejandra Niklison, Adolfo Francisco Meneses, Atilio Brandsen y Eduardo González Paz. A pocos metros, cerca de una iglesia, fue ultimado Fernando Saavedra. 

Miguel Romano, quien luego estuvo detenido en Jefatura de Policía, durante la masacre logró escapar con su hija, hoy querellante en la causa, al igual que su padre.