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AMPLIARYa no será este banco el que pague por orden del país

Economía aprobó el contrato de fideicomiso para sustituir el lugar de pago a los bonistas

El Gobierno dio luz verde al modelo de “Contrato de Fideicomiso", creado por la ley de Pago Soberano. Formalizó así el mecanismo para remover al Banco de Nueva York como agente y sustituir el lugar de pago.

La medida fue adoptada mediante la resolución 689/2014 del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas, que lleva la firma de su titular, Axel Kicillof, y se publica ayer en el Boletín Oficial.

La norma recuerda que esa ley declaró de interés público la “reestructuración de la deuda soberana realizada en los años 2005 y 2010, así como el pago en condiciones justas, equitativas, legales y sustentables al cien por ciento de los tenedores de títulos públicos de la República Argentina”. 

La norma recuerda que la ley de Pago Soberano declaró de interés público la “reestructuración de la deuda soberana realizada en los años 2005 y 2010, así como el pago en condiciones justas, equitativas, legales y sustentables al cien por ciento de los tenedores de títulos públicos de la República Argentina”.

Añade que el objetivo de la ley es implementar instrumentos legales que permitan a los acreedores el cobro de los servicios correspondientes, “en salvaguarda del orden público nacional y de los contratos celebrados”.
Se busca en ese sentido paliar “la ilegítima e ilegal obstrucción de los mecanismos de cobro” de los fondos pagados por la Argentina el 26 de junio pasado.

Las órdenes judiciales de la Corte de Distrito Sur de Nueva York, en el marco de la causa NML Capital Ltd. et al v. Republic of Argentina, "tal como han sido dictadas resultan de imposible cumplimiento, y violatorias", tanto de la soberanía e inmunidad nacional como de derechos de terceros, dice la resolución.

La medida señala que la ley de Pago Soberano creó una cuenta especial de la empresa Nación Fideicomisos en el Banco Central de la República Argentina (BCRA).

El objetivo de esa cuenta, denominada “Fondo Ley N° 26.984 - Pago Soberano de Deuda Reestructurada”, es “mantener en fiducia los fondos allí depositados y aplicarlos al pago de los servicios de deuda correspondientes a los títulos regidos bajo el Convenio de Fideicomiso 2005-2010”, según prevén las cláusulas de ese acuerdo.

Del mismo modo, la ley crea otra cuenta especial denominada “Fondo Ley N° 26.984 - Pago Soberano de Deuda Pendiente de Canje”, abierta “en virtud de la buena fe de la Nación Argentina, y de su voluntad y capacidad de pago en condiciones equitativas para todos sus acreedores, según la interpretación convencional y generalmente aceptada del término 'pari passu'”.

El contrato aprobado por el gobierno nacional autoriza al Palacio de Hacienda a reemplazar al BoNY como agente pagador del Convenio de Fideicomiso del 2 de junio de 2005, modificado el 30 de abril de 2010, y designa en su reemplazo a Nación Fideicomisos, sin perjuicio del derecho que asiste a los tenedores de bonos de designar a un nuevo agente fiduciario “que garantice el canal de cobro de sus títulos”.

Del mismo modo, se contempla la posibilidad de que los bonistas opten, en forma individual o colectiva, por solicitar un cambio en la legislación y jurisdicción; y Economía podrá instrumentar un nuevo canje, en términos y condiciones financieras idénticas, y por igual valor nominal, “pero regidos por legislación y jurisdicción argentinas o por legislación y jurisdicción francesas”.

En cuanto a la réplica al ministro alemán, según el cual “la Argentina ha vivido durante décadas por encima de sus posibilidades, no paga sus deudas y está por eso casi aislada del tráfico internacional de pagos”, Capitanich recordó que el voto de Alemania fue uno de los once negativos en a la resolución promovida por el país en Naciones Unidas para el proceso de reestructuración de deuda.

“Independientemente de que existen muchas y buenas inversiones de empresas alemanas, que forman parte de una tradición, nosotros observamos que la posición del ministro y su gobierno ha sido hostil hacia la Argentina”, reiteró el Jefe de Gabinete.

“Da que pensar -consideró- porqué las grandes potencias no tienen una actitud firme contra estos grupos minúsculos que pulverizan cualquier posibilidad de un funcionamiento correcto desde el punto de vista económico y financiero internacional”.

Según Capitanich, “pareciera que esos gobiernos están cooptados por grupos financieros y por fondos buitre que condicionan su actitud, su voluntad y sus expresiones”.