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AMPLIARLa policía británica comienza a civilizarse

Policía inglesa acepta nuevo código de " detención y palpado"

La Policía de Inglaterra y Gales aceptó adoptar un nuevo código de conducta para el uso de sus polémicos poderes de "detención y palpado" de sospechosos en la vía pública, con el fin de hacer que las fuerzas del orden sean más transparentes" y "menos racistas".

La ministra del Interior británica, la conservadora Theresa May, dijo que la iniciativa, que será adoptada por las 43 fuerzas de seguridad del país, fue elaborada en respuesta al "mal uso" de dichos poderes policiales, "que dañó" las relaciones entre la población y la Policía.

Bajo los nuevos planes, las fuerzas de seguridad se verán obligadas a registrar todos los operativos de "detención y palpado", como también sus resultados.

También se impondrán más límites al uso de las polémicas detenciones bajo el "artículo 60" de la ley de justicia criminal, que le permitían a la Policía efectuar arrestos de forma indiscriminada en la vía pública.

Los agentes del orden deberán contar ahora con nuevas autorizaciones para efectuar esas detenciones.

La Policía contará además con observadores públicos que presenciarán los operativos de detención y palpado.

Y a partir del próximo año, las fuerzas de seguridad comenzarán también a "mapear" en qué zonas se efectúan más esos operativos, para determinarse de ese modo si hay desproporción regional de arrestos.

Las modificaciones fueron elaboradas tras un informe de la Inspección de Comisarías que concluyó que el 27% de las detenciones y palpado no se efectuaban bajo sospechas concretas de la Policía, que implicó que al menos 250.000 de esos operativos efectuados el año pasado podrían haber sido ilegales.

Según la BBC, los poderes policiales bajo el "artículo 60" eran utilizados de forma indiscriminada y afectaban desproporcionadamente a los jóvenes negros.

"En la mayoría de los casos esos operativos no resultaban en arrestos", destacó.

Un inspector negro de la Policía, Nick Glynn, que pertenece a las fuerzas de seguridad de Leicestershire (Inglaterra), fue elegido para encabezar las reformas de esos poderes a nivel nacional.

Glynn dijo que él mismo fue víctima de operativos de detención y palpado en al menos unas 30 oportunidades mientras no llevaba su uniforme por parte de policías de otras fuerzas.

El año pasado, un reporte de la Comisión de Igualdad y Derechos Humanos indicó que los jóvenes negros y de origen asiático sufren muchas más detenciones y palpados por parte de la Policía que los jóvenes blancos.

La comisión sostuvo que la desproporción entre los diferentes grupos étnicos del Reino Unido "sigue siendo demasiado alta".

La Policía Metropolitana, la mayor fuerza policial de Gran Bretaña, confirmó que 251.161 personas fueron blanco de operativos de detención y palpado entre julio de 2013 y julio de 2014, de las cuales 47.141 fueron arrestadas.

Por su parte, el alto comisionado para Scotland Yard, Adrian Hanstock, dijo que el nuevo código de conducta "apoya la posición de la Policía Metropolitana para hacer que los operativos de detención y palpado sean más efectivos y se efectúen tras información de Inteligencia".

"Nuestra labor con las comunidades está ayudando a garantizar que seamos más transparentes que nunca en cómo estos operativos ayudan a reducir el delito y llevan seguridad a la población", concluyó.