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Para especialistas, es imprescindible la reforma al régimen de tenencia de drogas y de inimputabilidad

Las modificaciones que se introdujeron en el proyecto de reforma del Código Penal en materia del régimen de inimputabilidad y de tenencia de drogas para consumo personal son "imprescindibles" aseguraron especialistas, quienes debatirán mañana aspectos de la temática en el marco de las jornadas de consulta que se efectúan en torno a la nueva legislación.

 "El actual régimen de inimputabilidad es absolutamente discrecional lo que significa, por ejemplo, que una persona que robó un alfajor en un kiosko, si es considerada inimputable por el juez, éste puede decidir su internación de por vida en un hospital neuropsiquiátrico", describió a Télam Leonardo Gorbacz, Coordinador de la Comisión Nacional de Polí­ticas en Salud Mental.

Gorbacz, autor de la Ley Nacional de Salud Mental, señaló que "muchas personas creen que la inimputabilidad es sinónimo de impunidad y nada más lejos, porque las medidas que un juez puede tomar sobre una persona declarada inimputable pueden ser mucho más duras que incluso la pena que le hubiera correspondido".

"Además se plantea la evaluación de las personas en términos de blancos y negros, y existen muchos grises que habría que contemplar para no tener que forzar las interpretaciones", indicó.

El especialista explicó que la reforma del Código Penal "pone un límite a la discrecionalidad porque, por ejemplo, el juez no puede determinar el encierro a menos de que se trate de un delito gravísimo, y, aún así, la internación debe tener controles efectivos que permitan verificar la utilidad del tratamiento".

"Además -continuó- se establece la figura de inimputabilidad atenuada que corre para aquellos que tuvieron una comprensión parcial del hecho, entonces lo que se pide es la reducción de la pena más el tratamiento".

Para el caso de los delitos excarcelables, Gorbacz explicó que "el nuevo código penal prevé que la persona sea derivada a la justicia civil para que ésta actúe conforme la Ley Nacional de Salud Mental, entonces el tratamiento será indicado por el sistema de salud y no por el judicial".

El otro aspecto de la salud mental contemplado en la reforma es la despenalización de la tenencia de drogas para consumo personal que actualmente se encuentra penalizado a través de la conocida como Ley de Estupefacientes (23.737) que contempla penas de un mes a tres años de prisión.

"La persona que consume drogas no puede ser perseguida sino que debe ser atendida. Si alguien teme ser judicializado por tener estupefacientes es más difícil que se acerque al sistema de salud a pedir ayuda", sostuvo por su parte Mario Molina presidente de Fepra, Federación de Psicólogos de la República Argentina.

Molina, quien junto a Gorbacz y otros profesionales conformaron el espacio de Salud Mental Legítima para promover el debate sobre estas temáticas, aseguró que "en nuestro país existía una gran fragmentación de políticas a nivel educativo, de salud y judicial, pero desde hace unos años se viene trabajando rumbo a la integración de los recursos y esfuerzos en pos de un nuevo paradigma de salud mental".

"Este proceso incipiente implica la inclusión de pacientes, familiares y organizaciones dentro de los debates, una mayor articulación del sistema de salud con el judicial y la creación de los dispositivos intermedios que permitan de a poco ir abandonando al hospital monovalente o neuropsiquiátrico y avanzar hacia una atención más comunitaria", indicó.

Mañana "Salud Mental Legítima" junto con la Comisión Nacional Interministerial en Políticas de Salud Mental y Adicciones y la
Federación de Psicólogos de la República (FEPRA) organizan un encuentro en la Biblioteca Nacional que contará con la presencia de Raúl Zaffaroni, miembro de la Suprema Corte de Justicia, y de Roberto Carlés, coordinador de la comisión de Anteproyecto de reforma al Código Penal.

El objetivo de la jornada, que comienza a las 13 y de la que también participará la Directora Nacional de Adicciones y Salud Mental María Matilde Massa, será reflexionar y analizar aspectos de la intersección entre el Código Penal y Salud Mental en el actual Proyecto de Reforma, específicamente vinculados a la inimputabilidad y la tenencia de drogas para consumo personal.

"Uno de los puntos que se puede mejorar del proyecto es que no figure ni siquiera en los delitos graves la posibilidad de internación en hospitales neuropsiquiátricos, ya que debemos tender a que éstos desaparezcan, y que en su lugar diga `establecimientos adecuados`", señaló Gorbacz.

"También que se deje en claro que las evaluaciones de los tratamientos deben ser interdisciplinarias, y así seguramente surgirán más detalles", añadió.

Como cierre de la actividad, de la que se participarán especialistas y trabajadores del campo de la salud mental, se prevé la elaboración de conclusiones que serán enviadas a la comisión que trabaja en la reforma legislativa.