Enviar Nota | Imprimir

AMPLIARInfografia de los Brics, realizada por la Agencia Andes

Latinoamérica-BRICS, alternativa provechosa para el Sur

Quito, 16 jul (Andes).- La alianza entre Latinoamérica y el grupo BRICS, que integran Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, podría poner a buen recaudo a las economías de esta región frente a la hegemonía del capital económico-financiero internacional.

Los cinco países, exhiben en su conjunto la cuarta parte del Producto Interno Bruto mundial, el quinto lugar de las inversiones globales y mueven el 20 por ciento  de la inversión total reportada.

Con más del 42 por ciento de la población global en sus fronteras y un territorio de casi 38.5 millones de kilómetros cuadrados, los BRICS podrían convertirse en las economías dominantes hacia el año 2050, según estimaciones.

Si en sus inicios movían tan solo 21 millones de dólares, en la actualidad el bloque registra 280 millones, con lo cual multiplicó su capacidad en más de 13 y aporta en un 50 por ciento al crecimiento mundial.

Estadísticas oficiales señalan que los BRICS poseen el 45 por ciento de la fuerza laboral global, con más de tres mil millones de habitantes, una producción agrícola de dos mil millones de toneladas y reservas monetarias ascendentes a un 40 por ciento del total registrado en el orbe.

En suma, producen el equivalente al 35 por ciento de la generación eléctrica del mundo y exhiben una reserva petrolera de un aproximado a las 112.945 millones de toneladas; también atesoran el 36 por ciento de las reservas mundiales de materias primas.

Según fuentes consultadas este bloque genera el 19 por ciento del total global de exportaciones, el 21 por ciento de las inversiones extranjeras directas entrantes y el 14 por ciento de las  inversiones extranjeras directas salientes.

Entre sus objetivos, el grupo BRICS busca alcanzar prosperidad tomando como base su nivel de producción industrial y sus ventas al exterior; ubicarse como potencia competidora, próspera y estable, con bajos precios de sus productos.

Pretende, además, crear un mundo institucional multipolar; facilitar la cooperación internacional y la no confrontación con los países desarrollados, además de promover reformas en el orden económico internacional y combatir el cambio climático.

Luego de cinco cumbres entre sus representantes, este bloque llega a su sexto encuentro -con sede en Brasil- con el propósito de expandir su radio de influencia en Latinoamérica, para lo cual  acaba de firmar un acuerdo para un nuevo banco de desarrollo y un fondo para reservas de contingencia.

Los nuevos acuerdos impulsados desde Brasil buscan la cooperación en el financiamiento de proyectos a fin de sostener su potencial de crecimiento y respaldar a sus socios antes crisis financieras.

La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, anunció que los convenios aprobados cuentan en un inicio con 50 millones de dólares, pero ya se ha autorizado una ampliación hasta los 100.000 millones.

India presidirá el Banco de los BRICS en Shangai

Estas estructuras se erigen en una alternativa para las necesidades de financiación de los países en desarrollo y de compensación a las deficiencias de crédito existentes entre instituciones financieras multinacionales.

El fondo de contingencia deberá contribuir a la estabilidad financiera global y a complementar los mecanismos existentes, al tiempo que facilitará préstamos a sus miembros sin condicionamientos.

Los participantes en la cita brasileña celebraron la conclusión de un Acuerdo de Cooperación e Innovación en el campo de la cooperación interbancaria y el compromiso de incentivar mecanismos de integración como la Unión de Naciones Suramericans (Unasur),  el Mercado Común del Sur (Mercosur), y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).

Estas iniciativas se encaminan a sustituir, paulatinamente, el accionar de instituciones que responden al viejo orden económico, al dotar a sus miembros de estructuras o esquemas de financiación y cooperación que modificarían los actuales equilibrios de poder.