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AMPLIAR Brasil, presentado como el país que logró las mayores reducciones en la deforestación y en las emisiones a nivel global.

La ONU reconoció plan brasileño para disminuir la deforestación

Un informe divulgado el pasado jueves en la reunión de las Naciones Unidas (ONU) sobre el cambio climático destacó a Brasil como un ejemplo de éxito en la reducción de la deforestación y de las emisiones de gases de efecto invernadero.

Elaborado por la Unión de Científicos Preocupados (en inglés: Union of Concerned Scientists, UCS), con sede en Estados Unidos, el documento titulado “Historias de éxito en torno a la deforestación: Países tropicales en los que han funcionado las políticas de protección forestal y reforestación” contiene un capítulo dedicado a Brasil, presentado como el país que logró las mayores reducciones en la deforestación y en las emisiones a nivel global. Dieciséis países en África, Latinoamérica y Asia también se citan como ejemplos de éxito en la protección de los bosques.

El informe indica que el Gobierno brasileño redujo la deforestación en la Amazonia, la selva tropical más grande del mundo, mediante la creación de áreas ambientalmente protegidas a partir de la segunda mitad de la década de 1990 –proceso que se intensificó este siglo–, y la concesión de moratorias a empresas privadas sobre la compra de soja y carne de áreas deforestadas. “Los cambios en la Amazonia brasileña durante la década pasada y la contribución que han supuesto para ralentizar el calentamiento global, no tienen precedentes”, dice el documento.

De acuerdo con el principal autor del trabajo, Doug Boucher, el caso brasileño muestra que el desarrollo económico no es afectado por la reducción de la deforestación. “Por ejemplo, las industrias de soja y de carne de vacuno en Brasil prosperaron pese a las moratorias para evitar la deforestación”.

El estudio pone de relieve el papel desempeñado por las reservas de los pueblos indígenas en la conservación de la selva amazónica, las iniciativas departamentales y la acción de promotores públicos de Justicia, “un brazo independiente del Gobierno, separado de los poderes Legislativo y Ejecutivo, y con poderes para enjuiciar a los responsables de violar la ley”. El documento también menciona el apoyo internacional, como el acuerdo firmado con Noruega, que ya ha proporcionado US$ 670 millones en compensación por las reducciones.

Respecto al futuro, sin embargo, el informe señala que dos cambios en 2013 han planteado dudas sobre la continuidad del éxito del país en la protección del clima: las enmiendas al Código Forestal Brasileño que amnistían deforestaciones anteriores y el aumento del 28% en la tasa de deforestación entre 2012-2013 frente al período de 2011-2012. 

Aunque la deforestación haya aumentado un 28% en 2013, en comparación con 2012, la cifra fue un 9% inferior a la de 2011 y un 70% inferior al promedio registrado entre 1996 y 2005.Patrícia Pinho/Icmbio

El documento considera que es demasiado pronto para predecir si se ese crecimiento será una tendencia. Sin embargo, resalta que, aunque la deforestación haya aumentado un 28% en 2013, en comparación con 2012, la cifra fue un 9% inferior a la de 2011 y un 70% inferior al promedio registrado entre 1996 y 2005.

“Brasil incluyó en la legislación nacional su plan de reducir la deforestación en un 80% hasta 2020, pero para que se produzca un progreso continuado, deberá redoblar sus esfuerzos para reducir las emisiones”, afirma el documento. “Mientras tanto, la reducción de la deforestación de la Amazonia ha supuesto una enorme contribución a la lucha contra el cambio climático, más que la de cualquier otro país de la Tierra”, concluye.