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Italianos como "jeques árabes" en Brasil

Una "concentración de oro": así define el diario deportivo italiano de mayor circulación al resort de Mangaratiba donde concentra la selección "azzurra" y donde los jugadores, según otros comentarios, viven "como jeques árabes".

 "La Gazzetta dello Sport" compara este retiro paradisíaco al borde del mar con la modestia de España, que para en un centro técnico espartano, la humildad de Francia, que se aloja en un hotel poco costoso, y el ahorro de Alemania, que se hizo financiar por un sponsor la reconstrucción del edificio donde se hospeda.

La Federcalcio es el revés de la medalla, pues el plantel ocupa el resort Portobello (5 estrellas) con habitaciones que cuestan 350 euros (unos 450 dólares) por día: "Para los parámetros del lujo europeo no es tan magnífico y opulento pero económico, con toda seguridad, no lo es", escribe la publicación.

Para tenerlo con exclusividad, con sus 90 piezas donde cada jugador duerme solo en un enorme lecho matrimonial a su disposición, la Federcalcio italiana pagó 806.000 euros, si bien en caso de eliminación anticipada recuperará algo a través de la "reventa" de las habitaciones.

Que la selección de Cesare Prandelli no se hizo faltar nada lo testimonia el alquiler de una nave container para transportar desde Italia alimentos e instrumentales varios, incluidos lujosos televisores plasma, playstation y amenidades de distinto tipo, que sirven para distraer a los jugadores en las horas muertas.

No parece ser de 250.000 euros por cabeza, como se divulgó días pasados, el premio que cobraría cada "azzurro" en caso de ganar el Mundial, sino el doble, o sea 500.000 euros, o algo menos en caso de que llegue a la final o se clasifiquen terceros.

En este terreno, se precisa, Italia está en línea con los premios prometidos por las principales Federaciones europeas.