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AMPLIARCerros devastados en Valparaíso

Bachelet compromete "la mayor operación aérea" contra el incendio

na tercera noche a la intemperie se aprestan a pasar los residentes de los cerros de la ciudad chilena de Valparaíso, cuyas casas fueron arrasadas por las llamas de un voraz incendio que no cede desde el sábado, pese a la ardua labor de bomberos y personal de la Corporación Nacional Forestal.

"Quiero expresar toda mi solidaridad y la del Gobierno con las persona y las familias que están siendo afectadas por el enorme incendio en Valparaíso", señaló la mandataria, que durante la mañana encabezó una reunión con los ministros sectoriales en La Moneda, donde abordaron todos los efectos del siniestro.

El gobernador de Valparaíso, Omar Jara, confirmó la existencia de una nueva víctima fatal en el sector de Las Cañas, y se indaga una muerte más. Hasta el momento el total de fallecidos se elevó a 13. La situación en que está el cuerpo hallado impide certificar si es una mujer u hombre, sólo se dijo que es un adulto. Inicialmente se había hablado del hallazgo de los cuerpos sin vida de un padre y su hijo, que se encontraban desaparecidos.

Además, el fuego ha dejado más de 2.100 viviendas reducidas a cenizas y la gente no quiere abandonar el terreno por temor a perderlo, ya que es fruto de ocupaciones ilegales. Entre lágrimas, habitantes de Valparaíso volvieron al lugar para observar el escalofriante panorama, pero acostumbrado a las desgracias -terremotos e incendios- se pusieron a limpiar escombros junto a una multitud de voluntarios que han subido a pie los cerros para prestar ayuda.

La noche del domingo rebrotaron las llamas en el cerro Ramaditas y Rocuant, lo que obligó a evacuar a la población, y esta mañana se produjeron nuevos brotes en otros sectores. El ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo, aseguró que "estamos tomando todas las medidas para una posible evacuación, lo que no se puede perder de vista que lo importante es la vida de las personas y las mascotas", ante una eventual reactivación del fuego.

Añadió que "el gobierno va a seguir trabajando, estamos trabajando con casi mil voluntarios", mientras la presidenta Michelle Bachelet comprometió toda la ayuda necesaria para aplacar las llamas, incluso solicitándola al exterior. El ministro portavoz de La Moneda, Alvaro Elizalde, confirmó que existen 8.000 personas damnificadas, de las cuales 1.200 se encuentran alojadas en los ocho albergues dispuestos en Valparaíso. Advirtió que la cifra de 2.000 casas destruidas aumentará a medida que finalicen los catastros en los sectores afectados.

Entre las medidas dispuestas por el Ejecutiva figura el traspaso de casi un millón de dólares al municipio, a través de la Subsecretaría de Desarrollo Regional. Los fondos, mencionó Elizalde, estarán enfocados principalmente a la remoción de escombros y la resolución de situaciones de emergencia.

Explicó que el gobierno trabajará en tres radios de acción en Valparaíso: el primero, la construcción de barrios de emergencia, evaluándose la ubicación puntual de los lugares para levantar las mediaguas; el subsidio de arriendo y el subsidio de apoyo a las familias que hayan decidido ir a vivir a casas de familiares.

Elizalde definió desde la zona de la catástrofe que "el cuadro en la ciudad de Valparaíso es desolador", pero llamó a las familias afectadas a tener confianza ya que, agregó, "el Gobierno no los va a dejar solos".

El ministro agradeció las iniciativas ciudadanas desde todo Chile y también de los compatriotas residentes en el extranjero, canalizando la ayuda a través de los consulados.

Elizalde confirmó también la petición expresada a Argentina para apoyar en las zonas forestales del país que quedaron desprotegidas producto del enfoque en Valparaíso de las brigadas.

Subrayó asimismo que se trabajará de forma simultánea a la emergencia en el puerto para ayudar y reconstruir los sectores afectados en el norte del país, específicamente en las regiones de Arica y Parinacota, azotadas el 1 y 2 de abril por un devastador terremoto.