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AMPLIARMarta Rondoletto

Repudian la banalización de símbolos de lucha por los derechos humanos

La Fundación Memorias e Identidades del Tucumán, presidida por Marta Rondoletto repudió la instalación en un predio de El Bajo de los pilares de cemento con las leyendas Memoria, Verdad, Justicia debido a que en ese lugar no funcionó ningún Centro Clandestino de Detención, por lo que rechazaron la banalización de esos símbolos.

 En el marco de las actividades que se realizan alrededor del 24 de marzo, nefasta fecha que remite a la profundización de la violencia sistemática contra el pueblo argentino, “hemos tomado conocimiento que una organización social, ha hecho un uso que consideramos indebido, de símbolos que aluden al proceso realizado por las organizaciones de derechos humanos en los últimos 39 y ha colocado en la sede de su organización, ubicada en el Predio Ferial de El Bajo,  tres pilares de cemento en los que se inscribió las palabras ‘Justicia, Verdad, Memoria’”, expresó la presidenta de la Fundación Memorias e Identidades del Tucumán. 

“La utilización de esos pilares e inscripciones --lemas que dan cuenta de las trágicas horas vividas en nuestro país durante la implementación del terrorismo estatal, desde el operativo independencia a la dictadura militar -- fueron instituidas para todo el país por el Estado Nacional para señalar aquellos lugares que fueron establecidos por la maquinaria del exterminio para alojar, torturar y exterminar a miles de ciudadanos. Así lo testimonian los centros clandestinos de detención señalizados en nuestra provincia como el Arsenal Miguel de Azcuénaga, Jefatura de Policía, Escuelita Diego de Rojas de Famaillá”, indicó.

 En este sentido precisó que “los criterios utilizados para la marcación están expresados en la norma nacional 26691 que dice ‘son Sitios de Memoria los lugares que funcionaron como centros clandestinos de detención, tortura y exterminio o donde sucedieron hechos emblemáticos del accionar de la represión ilegal desarrollada durante el terrorismo de Estado ejercido en el país hasta el 10 de diciembre de 1983. Quedan comprendidos todos aquellos Sitios respecto de los cuales existieron pruebas suficientes sobre su funcionamiento como Sitios’”.

 Y agregó que “el objetivo que manifiesta en su artículo 2°, es garantizar la preservación de todos los Sitios a los fines de facilitar las investigaciones judiciales, como asimismo, para la preservación de la memoria de lo acontecido durante el terrorismo de Estado en nuestro país. La Ley 26.691 exige entre otros puntos importantes, disponer para cada uno de los lugares, una marca que lo determine como Sitios acompañada de una leyenda alusiva de repudio de los hechos que allí sucedieron, promover todo tipo de actividades educativas, y diseñar políticas públicas de la memoria en consulta permanente con organismos de derechos humanos". Nuestra provincia adhirió a la norma nacional en el año 2012 siendo promulgada con el Nº 8514”. 

 Por último resaltó que “colocar los pilares de memoria, verdad y justicia en lugares, como en el llamado Predio Ferial, ajeno éste a la actuación de la represión ejercida sobre la ciudadanía, expresa, cuanto menos, desconocimiento y tergiversación de la norma estatuida pero por sobretodo, implica mal informar y llevar confusión a toda la comunidad sobre lo acontecido en relación al terrorismo de estado. No hay un solo testimonio o indicio que señale que en el Predio Ferial de El Bajo, existió un lugar clandestino de detención o exterminio. Hacer memoria implica respetar la realidad de la información y de los acontecimientos. Así lo entendemos desde la Fundación Memorias e Identidades del Tucumán y consideramos que hay símbolos nunca deben entrar en la lógica del merchandising o del oportunismo político o social”.