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AMPLIARDos nuevos muertos y el gobierno detuvo a 15 funcionarios por violar DDHH en Venezuela

Dos nuevos muertos y el gobierno detuvo a 15 funcionarios por violar DDHH en Venezuela

Un efectivo de la Guardia Nacional y un mototaxista murieron asesinados ayer en Caracas, en el contexto de las protestas callejeras que se registran desde hace un mes, por las que 15 "funcionarios de seguridad" están presos y otros tres son buscados por la Justicia, informaron altas fuentes oficiales.

Las nuevas víctimas fatales fueron identificadas como el efectivo de la Guardia Nacional (policía militar) Acner López Lyon, de 25 años, y el mototaxista José Gregorio Amaris, baleados por "francotiradores", reportaron el presidente de la Asamblea Nacional (parlamento), capitán retirado Diosdado Cabello, y el viceministro de Interior, José Vicente Rangel (hijo).

López Lyon y Amaris murieron en medio de un enfrentamiento entre manifestantes y guardias nacionales en un sector de Los Ruices, en el municipio caraqueño Sucre, donde los primeros habían levantado una barricada, consignaron la agencia noticiosa estatal AVN, el canal Globovisión y el diario Ultimas Noticias.

Con ellos se elevó a 21 la cantidad de muertos en el contexto de las protestas callejeras que se registran cotidianamente desde el 6 de febrero en los estados andinos Táchira y Mérida, y desde el 12 de ese mes en el resto del país.

Más temprano, la fiscal general de la República, Luisa Ortega Díaz, había informado que hasta ese momento se llevaban registrados 19 muertos y 318 heridos (237 civiles y 81 uniformados) por las protestas.

Ortega Díaz, entrevistada por Globovisión, señaló también que hasta esta mañana 1.322 personas habían sido presentadas por el Ministerio Público ante los juzgados de control.

Detalló que de esa cantidad, "a 1.103 se le han aplicado medidas cautelares sustitutivas de libertad, en su mayoría con presentación cada 30 días, y a 35 se les ha dado libertad plena".

Asimismo, "han sido privadas de libertad 92 personas por presuntamente incurrir en los delitos de alteración del orden público, instigación pública, lesiones graves, trato cruel y homicidio, entre otros", indicó.

Ortega Díaz reportó que "el Ministerio Público ha recibido 25 denuncias por exceso policial durante las protestas de los últimos días, 15 funcionarios de seguridad se encuentran privados de libertad por violaciones a los derechos humanos y se libraron órdenes de captura contra otros tres funcionarios por el mismo motivo".

"El Ministerio Público está comprometido con la defensa de los derechos humanos, comprometido con el debido proceso y el respeto a las personas, y quien viole los derechos humanos será sancionado", resaltó la fiscal.

Mientras tanto, el gobierno instaló hoy en San Cristóbal, capital de Táchira, la primera versión regional de la Conferencia Nacional por la Paz inaugurada la semana pasada por el presidente Nicolás Maduro.

"Este es un diálogo sin condiciones; ya hemos vivido suficientes dolores", afirmó el alcalde del municipio caraqueño Libertador, Jorge Rodríguez, representante de Maduro en San Cristóbal.

El gobernador chavista de Táchira, capitán retirado José Vielma Mora, sostuvo que se trataba de "una reunión para el debate, para expresar las ideas" y no "un diálogo de conveniencias", y pidió no "desacreditar a los sectores que no participaron" de la Conferencia.

En tanto, Maduro afirmó que dirigentes políticos de oposición están "conspirando" contra Venezuela en el exterior.

"¿Dónde está el gobernador de Miranda (Henrique Capriles), que lo estamos llamando y no contesta el teléfono?", preguntó Maduro y agregó: "¿Será que está en Nueva York? ¿Hasta dónde van a llegar estos grupos violentos, agrediendo a la comunidad?"

"¿Dónde están los jefes políticos de la oposición, para que condenen estos eventos, para que busquen la paz?", insistió Maduro durante el acto de inauguración de un complejo de viviendas edificadas por el gobierno.

Más temprano, en un acto oficial en Los Teques, capital de Miranda, Capriles criticó el accionar de las fuerzas de seguridad en un enfrentamiento con manifestantes registrado ayer en el municipio mirandino Carrizal, que dejó al menos tres heridos y siete detenidos.

"Fue una batalla campal en la que hubo exceso de las fuerzas militares", dijo Capriles y añadió: "¿Qué es lo que quiere el gobierno? ¿Que haya una guerra, una tragedia? El fuego no se apaga con gasolina ni el descontento con represión".