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Crece el desempleo en América Latina en el primer semestre

Un significativo aumento del desempleo se observó en el primer semestre de este año en América Latina, con un 9,2% anual, por la acentuación de la desaceleración económica que pasó de un "impacto en cámara lenta" a una "crisis más marcada".

Detalles.

Así lo advirtió el último informe conjunto de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Comisión Económica Para América latina y el Caribe (Cepal), dado a conocer en Santiago. La edición de Coyuntura laboral en América Latina y el Caribe explicó que la proyectada caída del producto interno bruto (PIB) de 0,9% tuvo un impacto en los primeros seis meses de 0,6 puntos porcentuales de la tasa de ocupación urbana, la cual -junto a un incremento en la tasa de participación- causó un alza del desempleo de 1,6 puntos porcentuales, en comparación con igual lapso del año pasado.

Para el resto del año, no se prevé una mejora significativa, indicó el estudio, no sólo por su impacto en la demanda laboral sino por la expansión de empleos informales, sobre todo trabajo por cuenta propia que atenúa las cifras pero refleja un deterioro en la calidad del empleo.

De acuerdo a las estimaciones de OIT/Cepal, "es de esperar que la tasa de desempleo abierto urbano regional siga subiendo y termine 2016 en 9,2%". En promedio, el desempleo regional llegó a 7,0% en 2014 y a 7,4% en 2015.

"Si bien este desempeño negativo viene influenciado fuertemente por el caso de Brasil y su peso en los promedios ponderados, todos los otros países de América del Sur con información disponible, excepto Perú, también sufren incrementos en su tasa de desempleo", detalló el documento. En cambio, en los países de América Central y del Caribe, excepto Panamá y Trinidad y Tabago, la tasa de desempleo, aunque alta también, se redujo.

Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la CEPAL, y José Manuel Salazar, director regional de la OIT para América Latina y el Caribe, apuntaron que la heterogeneidad entre subregiones también se percibió en los indicadores disponibles sobre calidad del empleo, variación interanual del empleo registrado y del salario real en el empleo formal.

La publicación abordó en su segunda parte la participación de los países de la región en las cadenas globales de suministro y su impacto en el empleo decente. "La inserción de la región es más reducida que la de otras áreas del mundo y los encadenamientos relativamente pobres mostrados por las economías latinoamericanas y caribeñas (lo que) refleja un bajo grado de diversificación productiva", aseveró. El impacto de las exportaciones en el empleo es mayor en el empleo indirecto, especialmente en sectores como la minería o la producción de alimentos, que en el empleo directo, subrayó.

Las estimaciones para el primer semestre 2016 por países son: Argentina 9,3; Bolivia (s/i); Brasil 12,4; Chile 6,6; Colombia 10,9; Costa Rica 9,5; Cuba (s/i); Ecuador 7,0; El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua (s/i); México 4,4; Panamá 6,5; Paraguay (s/i); Perú 6,9; República Dominicana 5,7; Uruguay 8,2 y Venezuela; Bahamas12,7; Barbados 9,3, Belice 8,0; Jamaica 13,5; Trinidad y Tabago 3,8. América Latina y el Caribe 9,2.